Uno de nuestros clientes italianos más antiguos nos planteó un reto técnico: suministrar una serie de transformadores para SAI con doble alimentación destinados a un mercado oriental con una frecuencia de 60 Hz. Esta petición condujo al diseño de un transformador de cobre con reactancia integrada y secundario en zig-zag, con un primario en delta doble. En este artículo, exploraremos las características distintivas de esta solución y sus considerables ventajas en el mercado de los SAI.
LA CONFIGURACIÓN TECNOLÓGICA
La configuración en zig-zag del secundario ofrece un equilibrado de las corrientes de fase devueltas al primario, reduciendo el riesgo de desequilibrios causados por cargas desequilibradas o perturbaciones en la red. Además, gracias a esta configuración del transformador, tenemos una mejora de la calidad de la energía a la entrada del SAI, reduciendo los efectos perjudiciales de las perturbaciones y anomalías en la red.
La reactancia integrada reduce la corriente de cortocircuito, protegiendo el transformador y otros componentes del sistema. Además, la reactancia actúa como filtro, reduciendo los armónicos presentes en la red eléctrica, es decir, aquellos componentes de frecuencia no deseados en la forma de onda eléctrica que pueden ser causados por cargas no lineales en el sistema. La presencia de una reactancia puede atenuar algunos de estos armónicos.
El aspecto principal de esta configuración tecnológica reside en la elección de dos primarios delta separados, vinculados a la presencia de dos fuentes de alimentación separadas y aisladas a la misma tensión, lo que permite crear un sistema SAI con una configuración de «doble entrada» o «doble alimentación». En un sistema de alimentación de este tipo, el SAI está diseñado para recibir alimentación de dos fuentes de alimentación y conmutar automáticamente entre ellas en caso de fallo o interrupción de una de las fuentes. Esto garantiza la continuidad del suministro eléctrico a las cargas críticas.
El uso de dos primarios delta separados puede ser una elección de diseño específica para acomodar dos fuentes separadas, cada una de las cuales puede tener características y parámetros ligeramente diferentes. La separación de los primarios delta ayuda a aislar las dos fuentes, evitando flujos de corriente no deseados entre ellas.
LAS VENTAJAS DE UN SISTEMA DE DOBLE ALIMENTACIÓN
Esta configuración de doble alimentación ofrece una serie de ventajas:
- Redundancia y fiabilidad: La presencia de dos fuentes de alimentación independientes ofrece una mayor redundancia al sistema. En caso de fallo o interrupción de una de las fuentes, el SAI puede cambiar automáticamente a la otra fuente. Esta redundancia mejora significativamente la fiabilidad general del sistema.
- Mantenimiento sin interrupción: La presencia de dos fuentes permite programar el mantenimiento sin interrumpir la alimentación del SAI. Durante el mantenimiento de una de las fuentes, el SAI puede seguir recibiendo alimentación de la segunda fuente sin que los dispositivos conectados sufran ninguna interrupción.
- Adaptabilidad a diferentes fuentes de alimentación: En entornos en los que se dispone de dos fuentes de alimentación diferentes, por ejemplo, alimentación de red y alimentación de un generador de emergencia, la doble entrada permite utilizar ambas fuentes para una mayor flexibilidad y resistencia.
- Ahorro de energía: en algunos casos, la eficiencia energética puede optimizarse utilizando la fuente de alimentación más eficiente en función de las condiciones o el coste de la energía.
- Protección frente a problemas de calidad eléctrica: La presencia de dos fuentes puede ayudar a mitigar los efectos de los problemas de calidad eléctrica, como perturbaciones, variaciones de tensión e interrupciones, de una de las fuentes.
En un mundo en el que la fiabilidad y la continuidad del suministro eléctrico son cruciales, este estudio de caso es un excelente ejemplo de cómo la tecnología puede responder a necesidades específicas del mercado ofreciendo soluciones avanzadas y fiables.
